JOSEFINA PADRÓ
Hija única de una familia española acomodada, recibió en su infancia una educación familiar que reunía cariño, delicadeza y un alto grado de exigencia. Sobre esta base se construyó la educación concepcionista que recibió en el colegio de Madrid–Princesa (España) que ella personalizó en una búsqueda continua de la voluntad de Dios sobre ella.
Creyó encontrar la respuesta en la consagración religiosa. Pero ante la repentina muerte de su padre y la soledad de su madre viuda, siendo ella hija única y sin familiares cercanos, creyó su deber iniciar una nueva y abnegada etapa con su cuidado hasta el momento de su fallecimiento.
Dio entonces inicio a una tercera etapa de su constante entrega, emitiendo votos privados e ingresando como orante en el MLC (Movimiento Laico Concepcionista).
A finales del 2014 se inició el progresivo avance de un cáncer que minó su organismo, extendiéndose por todo él. Los últimos meses fueron de un gran sufrimiento vivido en constante abandono en las manos de Dios. Sufrió. Oró. Sonrió. Y murió yendo como laica concepcionista al encuentro del deseado de su alma cuando apenas había iniciado el año 2016.
En su funeral, llamó la atención la significativa participación de los miembros del MLC de Madrid-centro. ¡Descansa en paz, Josefina!